Guillermo Benitez Gancedo, CEO de Grupo Vento, hub de soluciones financieras a medida, analiza 2025 y comparte sus expectativas para 2026.
Fortuna: ¿Cómo describirían el 2025 para su sector? (en términos de mercado, desafíos macro, oportunidades que se generaron).
Benítez Gancedo: 2025 fue, sin dudas, uno de los años más desafiantes que recuerde para el sistema financiero. Un año marcado por una merma notable de la actividad, deterioro acelerado del crédito y una macroeconomía que golpeó tanto a grandes compañías como a pymes y consumidores individuales. En Grupo Vento, que reúne unidades de negocio con dinámicas muy distintas entre sí, pudimos observar cómo cada vertical enfrentó su propia tormenta, pero también cómo, en medio de esa inestabilidad, surgieron oportunidades que solo aparecen cuando el mercado se contrae y los jugadores tradicionales se repliegan.
El segmento corporativo fue un reflejo crudo del contexto: concursos que hasta hace poco parecían improbables, reestructuraciones profundas en empresas energéticas relevantes y tensiones crecientes en sectores estratégicos como el vitivinícola, por nombrar algunos casos. En paralelo, el universo PYME transitó una cadena de pagos debilitada, con cheques rechazados, cámaras saturadas y niveles de estrés financiero que obligaron a revisar todos los modelos de riesgo. Y del lado del consumo masivo, la mora duplicó los niveles históricos y alcanzó dos dígitos incluso en bancos tradicionales, algo que no veíamos desde hacía muchos años.
A esto se sumó la transformación del negocio de mercado de capitales: el final de la brecha cambiaria, del blend exportador y del cepo modificó las bases mismas del negocio en dólares financieros. Muchas ALyCs, sobredimensionadas tras años de operar con flujos elevados, tuvieron que reestructurarse, fusionarse o incluso cerrar. Pero como suele ocurrir en la Argentina, esos mismos movimientos abrieron espacios donde operadores más ágiles pueden actuar con mejor velocidad y precisión. Cuando los bancos se corren del crédito, aparecen ventanas que requieren capacidad de reacción inmediata, y allí encontramos oportunidades relevantes a lo largo del año.
Fortuna: ¿Cuáles fueron los principales hitos, lanzamientos, aperturas o logros que destacaría la compañía durante este año?
Benítez Gancedo: En términos corporativos, 2025 fue para nosotros un período de consolidación más que de expansión. Unificamos todas nuestras unidades bajo una misma marca paraguas, reforzando la identidad de Grupo Vento como hub integral de soluciones financieras. Abrimos la oficina de Tucumán, fortaleciendo nuestra presencia en el norte tras la llegada a Salta, e incorporamos un broker de seguros que complementa nuestra oferta para personas, pymes y grandes empresas. Fue un año para ordenar, alinear y profundizar capacidades, aun en un contexto donde la actividad general estaba lejos de acompañar. También fue un año que nuevamente demostró que estar cerca de nuestros clientes, marcó la diferencia.
Especial Fortuna: Visión de los CEOs 2025-2026
Fortuna: ¿Qué lecciones clave o aprendizajes se llevan de los desafíos enfrentados este año?
Benítez Gancedo: Las lecciones que deja este año son nítidas. La diversificación vuelve a demostrar su valor estratégico: contar con múltiples verticales no solo equilibra los impactos, sino que nos permite mantener actividad aun cuando un segmento se retrae. Es cierto que diversificar puede restar protagonismo específico, pero en un país volátil, la flexibilidad es un activo. También reafirmamos la importancia de mantener una estructura de fondeo sólida y líquida. En Argentina, la liquidez no es un beneficio: es una estrategia de supervivencia y, al mismo tiempo, una herramienta para capturar oportunidades en momentos de estrés.
Fortuna: De cara al 2026, ¿cuáles son los principales desafíos que identifica para su negocio en el contexto local?
Benítez Gancedo: De cara a 2026, observamos dos desafíos principales. El primero es determinar si la mora, tanto en empresas como en individuos, ya alcanzó su pico. Si comienza a descender, podremos profundizar nuevamente el negocio del crédito, que es vital para dinamizar la economía real. El segundo desafío es estratégico: aún no está claro cuál será el driver dominante del próximo año. Puede ser el crédito, la inversión en dólares, las emisiones primarias o una reactivación del financiamiento corporativo. Identificar ese vector a tiempo y acelerar sobre él será determinante.
Fortuna: ¿Qué oportunidades de crecimiento o nichos de mercado visualizan como prioritarios para el próximo año? ¿Dónde pondrán el foco?
Benítez Gancedo: En cuanto a oportunidades, vemos un espacio de crecimiento particularmente atractivo en financiamiento en dólares para sectores productivos. El rendimiento del fondo Avantia Multiestrategia en 2025 nos permitió ganar terreno en colocaciones en momentos donde los bancos se replegaron. Ese aprendizaje nos impulsa ahora a avanzar con un nuevo fondo en dólares orientado a financiar la cadena agroexportadora. Un vehículo con liquidez diaria, sólido respaldo en análisis crediticio y una propuesta clara y bien competitiva para inversores y empresas. Creemos que allí hay un nicho capaz de traccionar buena parte del crecimiento del próximo año y un lugar donde podemos marcar una diferencia real.
Fortuna: ¿Cuáles son los planes, proyectos o inversiones concretas más importantes que tienen previstos para 2026?
Benítez Gancedo: Nuestros planes para 2026 se orientan a consolidar el ecosistema de fondos, profundizar el negocio crediticio a medida que los indicadores se estabilicen, expandir nuestra presencia territorial en regiones productivas estratégicas e integrar aún más nuestras verticales para ofrecer soluciones financieras completas, ágiles y de alto valor. Con Argentina volviendo –según parece- al mercado internacional de crédito, será un año para volver a crecer, pero sobre bases más maduras y con un entendimiento más fino del riesgo y de la oportunidad.
Fortuna: En una frase: ¿Cuál será la palabra clave o el concepto que guiará la estrategia de su empresa el próximo año?
Benítez Gancedo: Y si tuviera que elegir una sola palabra para guiar nuestra estrategia en 2026, sería claridad. Claridad para leer el contexto, para identificar el motor del año, para priorizar recursos y, sobre todo, para acompañar a quienes confían en nosotros en un país donde la confianza se construye —y se demuestra— todos los días.